
Nuevamente, como todos los años, pudimos realizar nuestra preciada Marcha de la Marihuana. En Argentina, se venía haciendo el día número 20 de abril, como un “homenaje” a la expresión de 4:20 (número que, en Estados Unidos, hace alusión al consumo de marihuana). Este año fue diferente, ya que se realizó el 5 de mayo, insertándose en el movimiento mundial por la legalización, lo cual le da un respaldo mucho más fuerte al reclamo.

¿Legalización o despenalización?
Esta es una duda que atraviesa a los consumidores y a las organizaciones cannábicas en su conjunto, hay una diferencia muy grande entre estas dos cosas. Por un lado está la legalización del cannabis, que permitiría la posibilidad del autocultivo, libertad de consumo de la planta en cualquiera de sus formas (como aceites, cremas, fumandola, etc.) y, por otro, la despenalización, que permite el consumo para fumar o para aceites, siempre dentro de determinado marco de la ley. Hoy, en Argentina, está despenalizado el consumo de aceite, y ha habido ciertos casos en los que le han dado la inocencia a consumidores condenados por tener plantas o llevar marihuana encima. Sin embargo para consumir aceite, por ejemplo, hay que hacer un pedido de aceites norteamericanos, ya que no es legal la producción local, encareciendo así el producto.
La marcha, con el hashtag #Bastadepresxsxcultivar, pide por la LEGALIZACIÒN plena del consumo de marihuana en cualquiera de sus formas y, también, exige por la “inmediata liberación de todxs los presxs” que están en situación de encierro por consumo o tenencia de plantas. Al menos en capital federal, la marcha convoco a unas 50.000 personas y contó con la asistencia de espacios como la Federación de Organizaciones Cannábicas de Argentina(FOCA), de Emprendedores Cannabicos Unidos de Argentina (ECUA), de partidos políticos como Seamos Libres, Partido Obrero, Partido de los trabajadores socialistas (PTS), y la Juventud Radical, a su vez, obtuvo apoyo de la legislatura porteña, dándole así un marco de legalidad mucho más importantes al evento. Y, obviamente, un montón de hombres, mujeres, madres, padres, niños, niñas, hermanos… en fin, gente común que usa la planta habitualmente o simplemente la necesita para poder aliviar sus enfermedades o malestares.
¿Y la marcha cómo estuvo?
Nos gustaría remarcar que, aunque la marcha más grande fue en la Ciudad de Buenos Aires, hubo más marchas en otros puntos del país, logrando gran asistencia en lugares como Rosario, Santa Fe, Córdoba, La Plata, Neuquén, Roca… y, por primera vez, se hizo en muchos pequeños pueblos en donde cultivadores y cultivadoras, a pesar de ser pocos, salieron a dar la cara por lo que creen que es correcto.
En buenos aires arrancò la concentración alrededor de las 14 horas, un sábado tranquilo en Plaza de Mayo. A las 16 :30 ya arrancó la movilización hacia el Congreso, con la típica nube marihuanera que acompaña el lento caminar. Ya en el Congreso, había un Stand garantizado por la FOCA al que muchos cultivadores y cultivadoras, de diferentes organizaciones cannábicas, subieron y dieron sus discurso comentando lo que viene pasando y sus diferentes perspectivas. Seguimos decidiéndolo: cultivarnos para no tener que pagar costos altísimos por algo que podría crecer en nuestros patios o armarios, para poder consumir un producto que sabemos de dónde viene.

#Nomáspresxsxcultivar
Los saluda, como siempre, El Mono
Marco legal
Le legalización en Argentina viene siendo un proceso lento, pero sigue caminando. En marzo de 2017 se aprobó la ley 27.350, que regula el estudio y uso del cannabis con fines medicinales. Esto es importante, ya que no es una legalización para fines recreativos. La ley tiene 14 artículos en total y solo fueron reglamentados el Artículo 2, parcialmente el 3, que fija los objetivos del programa y los artículos 4, 6, 7 ,8 y 9. El Artículo 1, parte del 3, el 5, y los artículos 10, 11, 12 y 13 no fueron reglamentados. Ahora, ¿de qué manera afecta esto la ley?
Básicamente, la ley se divide en dos partes, por un lado, en la utilización y legalización del consumo medicinal y, por el otro, en las competencias acerca de quien tiene que llevar adelante las distintas cuestiones de la ley para que sus efectos sean reales y tangibles, y no simples palabras escritas en un papel archivado. Sumado a esto, podemos notar que lo que sí se reglamentó es la obtención y legalización de cannabis medicinal para determinados pacientes. Este sería traído e importado (en forma de aceite) desde el exterior porque, en términos concretos, los artículos que no se reglamentaron son los que habilitarían una producción nacional, capaz de abastecer a los pacientes que la necesiten. Por eso decimos que es una legalización parcial: porque aunque se puso a funcionar la obtención de cannabis, la producción nacional será reducida a una pequeña fracción que será cultivada por el INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria) junto al CONICET (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas) para hacer investigaciones sobre sus características y posibles formas de utilización. A esto se le suma que, como no se reglamentó la producción, no se creó un fondo presupuestario, teniendo que quitar así una porción del presupuesto del Ministerio de Salud (que desde el comienzo de la gestión de Mauricio Macri como presidente ha visto su presupuesto reducido en términos reales).
De todas formas, el autocultivo sigue siendo ilegal, aunque -en términos jurisprudenciales- ha habido muchos casos en donde se falló a favor de cultivadores y cultivadoras que tenían plantas para consumo personal (o para el consumo de gente cercana), tanto para fines medicinales como recreativos. Además, el Artículo 5, que dice “La autoridad de aplicación, en coordinación con organismos públicos nacionales, provinciales y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, debe promover la aplicación de la presente ley en el ámbito de las provincias y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”, no fue aprobado. En concreto: el poder ejecutivo nacional (la presidencia) no va a hacerse cargo de que realmente se lleve adelante esta política en municipalidades o provincias, dejándola a la buena fe de los gobernadores de cada provincia. Aunque hemos visto ciertos rastros de luz en la provincia de Neuquén con la legalización y las primeras importaciones de aceite, se sigue persiguiendo a los productores nacionales y artesanales por crímenes caratulados como “narcotráfico”, con penas que llegan hasta los 15 años de quita de libertad ambulante y encierro en la cárcel.
Las personas que estén inscriptas en el programa de cannabis medicinal recibirán el producto de manera gratuita. A las que no estén inscriptas se verá cómo facilitarles la obtención legal, por lo menos en teoría. Sin embargo, el Ministerio de Defensa, a cargo de Patricia Bullrich, anunció un plan de lucha contra las drogas similar al utilizado en países como México y Estados unidos (que solo ha aumentado la persecución y la violencia alrededor de la Marihuana y otras drogas ilegales), en vez de probar otras formas de intervención que han dado mejores resultados en otros países, como la legalización y producción estatal que lleva adelante nuestro país vecino: Uruguay. O los métodos de reducción de riesgos usados en Holanda, Bélgica e Islandia. Parece que, aunque se esté avanzando en la batalla cultural por la aceptación de la marihuana para diversos usos (y la no estigmatización de sus usuarios), el presidente y su gabinete no se ven tan entusiasmados por la legalización plena del cannabis.
¿Y ahora qué?
Sabemos muy bien que, a pesar de todo lo que se ha avanzado en estos últimos años para podernos sentir realmente libres y tranquilos al consumir marihuana y sus derivados, nada de esto fue gratis, y aún hoy hay muchísimos presos y presas por cultivar (y no por cometer un crimen real, que pueda perjudicar a otros). En este sentido, la FOCA (Frente de Organizaciones Cannábicas de Argentina), está convocando a ser parte de la marcha mundial de la marihuana, el sábado 5 de mayo, con la consigna “BASTA DE PRESXS POR CULTIVAR” (#bastadepresxsxcultivar), en CABA se marchará a las 16:30 hs. Creemos que es muy importante seguir dando esta disputa y el sábado participar de la marcha, comentar acerca de ella, difundirla y poder llegar a ser una cantidad grande de personas para que empiecen a valorarnos y acelerar un poco las cosas. Tenemos muy claro que ninguna de las legalizaciones a nivel mundial han sido dadas desde el poder estatal de turno, sino que fueron efecto de la presión de los usuarios que hemos vivido situaciones muy difíciles de violencia, cárceles, encuentros indeseados con el crimen organizado, etc., cuando solo somos simples cultivadores de una planta.
Día a día se demuestra que el cannabis tiene cada vez más usos enenfermedades de distintos tipos, y que prohibir su uso es no reconocer los beneficios que podría traer para mucha gente. Es clave esta marcha de la FOCA, que nuclea a màs de 100 organizaciones cannábicas con distintos puntos de vista, entre ellas a Mamá Cultiva, que lucha por el autocultivo para poder producir de manera privada en sus hogares, para sus niños y niñas. A su vez, tenemos en cuenta que si este proceso no es acompañado con un aumento de inversión en el presupuesto del ministerio de Salud en el INTA y el CONICET, no vamos a tener nunca una producción nacional de marihuana capaz de abastecer a los posibles compradores/pacientes. Se deberá importar desde otros países, a precios muy elevados, lo cual es completamente innecesario, ya que está probado que en Argentina se puede cultivar muy buena marihuana. Como se puede ver, esto complicaría a las familias y consumidores que tengan menos recursos, con una posibilidad de recaer en la obtención ilegal (y de mala calidad) del producto.
¡Espero verlos a todes el 5 de mayo, saludos!
¡Basta de presos y presas por cultivar!
Mono

*El link a la ley por si algún curioso o curiosa quiere leerlo: http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/anexos/270000-274999/273801/norma.htm