Los gobiernos de ambas provincias se pusieron de acuerdo para avanzar en la elaboración de forma conjunta esta sustancia que ayuda en el tratamiento de diferentes enfermedades
El gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, firmará este lunes con su par de Jujuy, Gerardo Morales, un convenio de cooperación en materia científica para que ambas provincias comiencen a investigar y producir de forma conjunta cannabis medicinal.
El anuncio, formulado por la administración de Valdés, señaló que este acuerdo será rubricado por los dos mandatarios a las 19:00 en el Salón Amarillo de la Casa de Gobierno correntina. El proyecto se enmarca la Ley Nacional Nº27.350, que regula y promueve el estudio del uso que puede tener esta planta para el tratamiento de diferentes enfermedades.
El gobierno de Jujuy ya elabora diferentes derivados medicinales de cannabis en la finca El Pongo, donde funcionan una zona núcleo de producción, una cámara de germinación e invernaderos. “Este año fabricaremos el primer aceite de cannabis medicinal de la República Argentina”, aseguró el 7 de febrero pasado el gobernador Morales al recorrer el emprendimiento.
El referente del radicalismo, que viajó este domingo a Corrientes para llevar adelante una intensa agenda de actividades junto a Valdés por los festejos del Carnaval, destacó en aquella oportunidad que en este lugar se avanza con la investigación del “fenómeno medicinal” de esta planta y también se trabaja «en el desarrollo científico y tecnológico de sus derivados”.
Por su parte, la Legislatura correntina sancionó el 29 de agosto de 2018 una ley a partir de la cual se decidió que la provincia adhería a la normativa que existe a nivel nacional en esta materia. De esta forma, también incorporaron a su sistema de salud pública los derivados del cannabis para uso medicinal o terapéutico en el tratamiento de síndromes, trastornos y enfermedades.
Según informaron las autoridades de Corrientes, el uso de este producto natural se extiende a patologías tales como epilepsias, enfermedades degenerativas, cáncer, náuseas y vómitos derivados de quimioterapia, VIH – Sida, autismo, Síndrome de West, dolores crónicos, bromialgia, glaucoma, esclerosis múltiple, Parkinson, enfermedades poco frecuentes, tratamiento del dolor, estrés postraumático.
Además, la ley provincial estipula que esta planta y sus derivados podrán utilizarse para cualquier otra condición de salud, existente o futura, en la que se considere de necesaria prescripción.
Este acuerdo llega, además, en un contexto de avance en las investigaciones en esta materia, impulsado también por el mismo Gobierno nacional: a fines de enero, la ministra de Seguridad, Sabina Frederic, se reunió con científicos del Conicet, médicos y la presidenta de de la agrupación Mamá Cultiva, Valeria Salech, que promueve el uso del cannabis medicinal.
Este grupo le propuso a la funcionaria que como paso previo a la regulación de la sustancia, que probablemente lleve un largo tiempo de discusión en ambas cámaras del Congreso, exista la chance de sacar un decreto presidencial para permitir el autocultivo.
Fuente: Infobae